Los cursos 4° Básico A y B vivieron una emotiva liturgia que marcó el inicio del Hito del Altar Familiar, un momento significativo en su camino de fe. En esta celebración, los apoderados tuvieron un rol fundamental, acompañando a sus hijos e hijas en este compromiso espiritual.
Fue hermoso ver cómo cada familia se hizo presente con amor y devoción, reforzando la importancia de la fe en el hogar. El altar familiar representa un espacio de encuentro con Dios dentro de cada casa, y esta liturgia simbolizó el primer paso en ese camino.
Agradecemos a todas las familias por su participación y compromiso. Que este hito fortalezca el vínculo entre padres, hijos e hijas, y los acerque aún más a la presencia de Dios en su vida cotidiana.



